martes, 26 de enero de 2016

Lazarillo de Tormes

Tratado primero.
El primer tratado comienza con Lázaro de Tormes contando la historia de su infancia. Su sobrenombre proviene del lugar donde nació, que fue el río Tormes. A los ocho años, su padre, Tomé González, fue acusado de robo y obligado a servir a un caballero en contra de los moros. Durante esta expedición perdió su vida.
En un mesón conoce su madre a un ciego, al que le pareció que Lázaro le servía como guía. Su madre le dio permiso y Lázaro partió junto al ciego. El ciego era muy astuto y, más que cualquier otro, le enseñó a Lázaro lo difícil que era la vida. El ciego, también, era muy avaro y apenas le daba de comer. Cuando finalmente Lázaro se cansa de vivir con el ciego, éste engañó a su amo para que se diera contra un palo para poder salir de él.


Tratado Segundo
En este tratado Lázaro se encuentra con un clérigo. Lázaro aceptó el trabajo que le propuso el clérigo. A Lázaro no le fue muy bien en este trabajo, ya que el clérigo era avaro y no le alimentaba decentemente. Llegó el momento en el que Lázaro se cansó, y decidió robarle al clérigo el pan de la misa para poder comer. Para poder conseguir el pan, el sacó una copia de la llave del baúl dónde estaba el pan, y lo saco una noche, y se lo comió. Al el clérigo enterarse de esto, decidió asegurar el baúl, pensando que eran ratones que se comían el pan, pero cuando encontró que era Lázaro, el lo despidió de su trabajo.






Tratado Tercero
Lázaro llegó a Toledo, donde, por quince días, vivió de limosnas. Un día, se encontró con un escudero de muy buena apariencia, quien fue su próximo amo. Su nuevo hogar fue una casa con poco alumbrado. La casa carecía de muebles.
Lázaro entonces se dio cuenta de que el escudero, aunque aparentaba ser un hombre de buena familia, en realidad era pobre. Para poder comer, Lázaro tuvo que mendigar, y darle parte de lo que recibía al escudero. Un día el gobierno de esa área prohibió el mendigar por las calles, y Lázaro, por suerte, consiguió comida a través de unas vecinas. El escudero estuvo sin comer por ocho días, hasta que consiguió un real para mandar a Lázaro a comprar comida al mercado.
Más tarde los dueños de la casa del escudero vinieron a cobrar el alquiler de la casa, pero el escudero se excusó y desapareció. Lázaro se quedó una vez más sin amo.



Tratado Cuarto
Las vecinas llevaron a Lázaro a dónde el Fraile de la Merced, su próximo amo. Al fraile le gustaba mucho caminar y visitar. Tanto caminaron Lázaro y el fraile que en ocho días Lázaro rompió su primer par de zapatos. El fraile fue el primer amo en regalarle un par de zapatos. Lázaro se cansó de seguirlo y lo abandonó.



Tratado Quinto
En este tratado, Lázaro se encuentra con un buldero. El buldero engañaba, junto a un alguacil, a la gente, tratando de convencerla para que creyeran en sus ideales. Por ejemplo, ellos hicieron un "drama" para que la gente creyera en los milagros. Después de cuatro meses Lázaro dejó al buldero, y siguió su camino.




Tratado Sexto
Su próximo amo fue un maestro pintor de panderos, con el cuál duró muy poco. Una vez, Lázaro entró a una Iglesia, dónde se encontró con un capellán, siendo éste su próximo amo. El capellán le dio a Lázaro un asno y cuatro cántaros de agua para ir a vender agua por la ciudad. Este fue el primer trabajo que tuvo Lázaro dónde ganaba comisiones todos los sábados. Estuvo en esas condiciones por cuatro años, y, ahorrando poco a poco, pudo comprarse su primera espada y ropa usada. Después de haber mejorado Lázaro su apariencia , dejó al capellán y también dejó su oficio.





Tratado Séptimo
Después Lázaro se asentó con un alguacil. Duró muy poco con él, porque le pareció que el oficio de su amo era peligroso.
Llegó el día en el que el arcipreste de San Salvador vio a Lázaro y lo casó con una criada suya. Vivía muy bien con su nueva esposa, en una casa al lado del arcipreste. Luego comenzaron a formarse cuentos sobre su esposa y el arcipreste. La mujer de Lázaro lloró mucho por estos cuentos, pero Lázaro la tranquilizó. El decide no hacerle caso a los cuentos para que no hubiera una intervención en su felicidad. Finalmente llegó a un período de estabilidad en su vida, y para él no había nada mejor.






Caracterización de cada uno de los amos de Lázaro :

  • El ciego: Este es importante para Lazarillo ya que es su primer amo y de quien digamos que aprende más, es una persona astuta y sabia. Pero trata muy mal a Lazarillo casi matándolo de hambre. Es una persona avara, mezquina, astuta y egoísta.
  • El clérigo: Este personaje es un poco ingenuo ya que se cree todo lo que Lázaro le dice, sin comprobar y sabiendo que este se está muriendo de hambre. Pero también se porta mal con Lázaro por dejarle casi sin comer. Es una persona avara y cruel.
  • El escudero: Con este aprende que las apariencias engañan y que se puede disimular el hambre perfectamente, es una persona que parece no tener mucho carácter, y que no quiere dar pena a la gente. También se acaba portando muy mal con Lázaro dejándole con todas las deudas. Es avaricioso.
  • El fraile: De este no se sabe nada ya que en la obra sólo dice que es una persona andadora.
  • El buldero: De él aprendió una cosa que no le gustó demasiado, y es engañar a las personas y así ganarse la vida. El buldero es una persona mentirosa, la cual no le importa la religión con tal de ganar dinero. Es desvergonzado y desenvuelto.
  • El capellán: Este le proporciona un trabajo a Lazarillo, así él aprende lo que es trabajar. El capellán parece honrado y buena persona, parece tener bondad porque según la obra el capellán no le dice nada a Lazarillo cuando este se va.
  • El arcipreste de San Salvador: Este le enseña lo que es vivir con una mujer. Parece amigo de Lázaro y parece un hombre de buena fé y sensible.


    Portada de la edición de Medina del Campo de 1554, impresa por Mateo y Francisco del Canto.
   
                                                          Novela picaresca.




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